POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE:
Todos los tejidos necesitan nutrientes para poder realizar sus funciones. Estos nutrientes los transporta la sangre, pero también es importante eliminar los residuos y toxinas que estos mismos tejidos producen y no se acumulen evitando futuras enfermedades. Para ello, el cuerpo cuenta con el sistema venoso principalmente, el cual, recoge la gran mayoría de estos residuos, pero del resto, se encarga el sistema linfático. Estos dos sistemas van de la mano, por lo que, si uno no funciona correctamente, el otro se verá afectado.

Papel fundamental en el sistema inmunológico. Su función es la de producir anticuerpos y corpúsculos blancos para la defensa del organismo. Interviene en la maduración y producción de linfocitos B y T
Recoge exceso de líquido, lípidos del intestino delgado
Filtra cuerpos extraños y gérmenes que entran en la sangre
ELEMENTOS QUE LO COMPONEN:

– Linfa
– Sustancia fundamental (facilita la lubricación, limpia y distribuye los nutrientes perimitiendo su absorción y eliminación.
– Vasos linfáticos (parecidos a venas y arterias)
– Ganglios (estaciones de filtración, depuración y reposo). Conectan los vasos linfáticos.
-Órganos:
- Amígdalas
- Timo
- Bazo
- Médula ósea roja
- Placas de Peyer (intestino delgado),
- Vías respiratorias.
¿QUÉ ES LA LINFA?
Es el líquido semitransparente que compuesto principalmente por agua (95%), linfocitos, proteínas, bacterias, urea, ácidos grasos etc). En el sistema circulatorio, las venas y arterias transportan la sangre, y los vasos linfáticos la linfa.
¿QUÉ PROVOCA QUE ESTE SISTEMA SE ALTERE?
Para que el cuerpo funcione correctamente tiene que realizarse un buen intercambio de líquidos y nutrientes entre los componentes del sistema circulatorio. Las células deben nutrirse y poder eliminar sus detritos. Para ello, debe existir el llamado EQUILIBRIO DE STARLING

La presión hidrostática vascular (sanguínea en este caso) es la fuerza que ejerce la sangre hacia fuera. Si ésta es mayor que la oncótica, tiende a provocar una filtración. Los elementos saldrían al espacio extravascular.
Si por el contrario, la presión oncótica extravascular (la que ejercen las proteínas) es mayor, provocaría una reabsorción.
La situación fisiológica en condiciones normales es una filtración y reabsorción en equilibrio constante, permitiendo la entrada y salida.
Cualquier enfermedad o proceso patológico que ponga en peligro este equilibrio, provocará un edema. Éste puede ser venoso o linfático.
TRATAMIENTO
DRENAJE LINFÁTICO MANUAL (DLM)
Es una técnica fisioterapéutica en la cual, mediante un masaje suave y lento (movimientos de bombeo, ligeras presiones-descompresiones y deslizamientos), se estimula las cadenas ganglionares favoreciendo así la circulación de la linfa hasta en un 40%.
Es manual, el fisioterapeuta realiza con sus manos y sin ningún tipo de crema los movimientos que el sistema no es capaz de hacer por sí solo, ayudando así a que el líquido extravasado pueda regresar a la circulación y sea eliminado eficazmente.

Muchos pacientes cuando vienen a consulta piensan que el drenaje es doloroso, pero en realidad, es todo lo contrario, es muy suave y placentero.
Es importante que lo realice un fisioterapeuta especializado en la materia, ya que la presión que se ejerce debe ser precisa y el recorrido debe seguir unas direcciones concretas. Si estas pautas no se siguen, el resultado podría ser un colapso del sistema linfático (si la presión ejercida es mayor de la debida) agravando la sintomatología.
Efecto del DLM:
- Vaciar el líquido extravasado
- Ayuda al sistema inmunológico (defensa, regeneración de tejidos más rápido)
- Mejora el tropismo muscular, nervioso y dermatológico
- Relajación, ayuda a equilibrar el sistema nervioso vegetativo.

Existen varias técnicas del drenaje linfático manual, siendo las más conocidas Vodder y Leduc. Nosotros valoramos y adaptamos la terapia a cada paciente, usando la más adecuada en cada caso. Además, añadimos otras terapias complementarias para aumentar todavía más los beneficios si el caso lo requiere.
- Osteopatía: normalizamos los tejidos afectados o que dificulten la buena circulación de la linfa, y actuamos sobre el sistema nervioso vegetativo.
- Terapia miofascial, ya que la fascia es la “carretera” por donde van los vasos linfáticos
- Vendaje neuromuscular (kinesiotape): debido a la forma en la que está fabricado en kinesiotape y la forma en la que lo coloquemos, permite evacuar el edema de las zonas afectas a los ganglios.
- Hipopresivos: ejercicios en los que mejoramos la postura, la respiración y relajamos el diafragma entre otros muchos beneficios. Con ellos provocamos un efecto de succión que hace que el retorno venoso se vea favorecido
- Ejercicios específicos.
INDICACIONES
- Edemas debidos a traumatismos, embarazos siempre que no haya complicaciones, postquirúrgicos.
- Edema debido a extirpación de ganglios, siendo frecuente en el tratamiento del cáncer, siempre y cuando el cáncer esté controlado por un oncólogo y nunca en fase aguda.
- Linfedema congénito o adquirido
- Estrés, dolor o problemas viscerales
- Piernas cansadas
- Celulitis
- Hematomas
- Varices
- Fibromialgia
CONTRAINDICACIONES
- Absolutas: – Tumores malignos no controlados
- Infecciones agudas
- Insuficiencias cardíacas o renales descompensadas
- Flebitis, trombosis y tromboflebitis en curso
- Relativas: – hipertiroidismo (cambiaremos ciertas maniobras)
- Hipotensión arterial: debe hacerse de forma progresiva son sesiones cortas e ir avanzando según el paciente se vaya adaptando
- Infecciones crónicas: evitar la zona de infección
- Tumores controlados: realizar el drenaje a distancia del tumor
- Asma bronquial. Evitaremos zonas que estimulen un broncoespasmo
- Enfermedades autoinmunes: lupus, artritis reumatoide.
- Úlceras abiertas: no en la úlcera, pero sí en la periferia para movilizar el líquido y cicatriz
RECOMENDACIONES GENERALES:
Beber agua (1´5-2 litros al día)
Dieta rica en frutas y verduras evitando la sal
Realizar un deporte de forma regular, respiraciones profundas
Evitar ropas ajustadas, posturas mantenidas